Sigue afuera del circuito. Después del US Open, la kazaja Elena Rybakina, N°5 del mundo, no pudo volver a jugar oficialmente. Ahora la kazaja se dio de baja en el WTA 500 de Tokio.
"Lamento mucho tener que retirarme de Tokio. Tenía muchas ganas de jugar el torneo y amo la ciudad. Tengo que priorizar mi salud y mi estado físico y necesito tiempo para llegar al ciento por ciento de salud", dijo la jugadora.
Rybakina, de 24 años, se hizo conocida en el planeta al coronarse en Wimbledon 2022 y ratificó su status al llegar en enero pasado a la final del Abierto de Australia, que cedió ante la bielorrusa Aryna Sabalenka, ahora N°1 del ranking mundial.
Sorpresivamente, la kazaja cayó en tres sets en la tercera ronda del Major de Nueva York, a manos de la rumana Sorana Cirstea, y luego no pudo estar bien de físico para retomar la gira.
En la previa, se había mostrado disconforme, igual que otras colegas, con los organizadores del WTA 500 de Tokio ya que, como no sucedía hace tiempo, volvieron a otorgar los famosos "Performance Bye". Eso se trata del privilegio para los que disputan torneos consecutivos y alcanzan instancias decisivas como semifinales o finales y, al siguiente torneo, tienen la chance de evitar la primera ronda y arrancar recién en la segunda.
Tras el sorteo, Rybakina figuraba en la misma mitad del cuadro que la polaca Iga Swiatek, escolta de Sabalenka en la clasificación internacional.